Es curioso cómo la ciudad coge otro ritmo cuando anochece. Los coches se vuelven más violentos, la gente parece tener más prisa y las farolas iluminan el camino de los transeúntes más despistados.
La Plaza Santa Ana siempre me ha parecido uno de los lugares más bonitos de Madrid. Tiene ese no sé qué que tanto me gusta. Se respira cierto glamour y aroma a expectativa, sobre todo por la gente que se aglutina alrededor de los portones del Teatro Español. Las puertas se abren por primera vez para HOY Magazine, y una vez dejamos caer nuestros cuerpos sobre las butacas del palco, da comienzo la función. Tres, dos, uno, se apagan las luces. Hoy hemos venido a ver ‘Postitución’.
Solo el nombre de la obra denota cualquier cosa menos indiferencia. Dos prostitutas hacen su entrada triunfal. Una de ellas exacerba un arsenal de datos que desencaja la boca de muchos de los espectadores. Porque si algo está claro, es que las prostitutas son uno de los silencios más oscuros de este país. Principalmente, porque no tienen voz.
“Si algo está claro, es que las prostitutas son uno de los silencios más oscuros de este país”
Entre destello y destello camuflado por las notas de un piano que suena de fondo, Carmen Machi aparece en escena como una estrella de Hollywood. Pregunta con cierto halo de elegancia a la portavoz (Nathalie Pozas) por qué se prostituye. Mantiene la calma, trata de no sorprenderse y de conectar con su propia homilía.
Sin embargo, en cuestión de pocos segundos, se convierte en una de ellas. Ahora sí que sí, comienza el espectáculo. Y no es un tema burdo o banal, aunque sí explícito y muy (pero que muy) visual.
La ejecución de la obra va de menos a más. Comienza siendo un capullo enraizado con debilidad, se aprecian ciertos traspiés de texto, consecuencia de ser una obra nueva a la que todavía no se han acostumbrado; pero conforme avanza el transcurso de los hechos y los sketches acontecen uno detrás del otro, la obra consigue fluidez, fuerza y un argumento consolidado con un mensaje muy claro: las putas, antes que putas, son mujeres. Y no las valoran, no las integran en la sociedad, no las escuchan, no cuentan con ellas y nadie las tiene en cuenta para nada.
”Las putas, antes que putas, son mujeres”
‘Prostitución’ invita a reflexionar sobre la hipocresía humana, sobre las condiciones (y consecuencias) del tráfico de personas, sobre los prejuicios que nos hacemos y sobre las injusticias sociales.
Gemidos, violaciones simuladas, juegos de luces que aturden, movimientos ordinarios, violencia, discursos envalentonados que sirven de tapadera para encubrir el miedo, indecisión y el sentimiento de prisión al que se ven sometidas por no poder mejorar su calidad de vida. “Mientras a mis hijos no les falte de nada, aquí estaré”; decían.
Sin duda, un must para el que hay que prepararse. Reflexiona, conciénciate, investiga, aprende y contempla la revolución de las putas en ‘Prostitución’, en el Teatro Español.
Ficha artística
Dramaturgía y Autoría: Albert Boronat y Andrés Lima
Sobre textos y testimonios de Virginie Despentés, Amelia Tiganus, Juan Cavestany, Ana María, Isabela, Lucía, Alexia, Alicia y la Sra. Rius.
Piano: Laia Vallés
Actriz grabación: Lucía Juárez
Diseño de Escenografía: Beatriz San Juan
Diseño de Iluminación: Valentín Álvarez (AAI)
Composición musical/sonido: Jaume Manresa
Diseño sonido: Enrique Mingo
Diseño vídeo creación/grabación: Miquel Àngel Raió
Dirección documental: Carolina Cubillo
Dirección de producción: Joseba Gil
Producción ejecutiva: Héctor Mas
Ayte. Escenografía e Iluminación: Alberto Hernández (AAI)
Ayte. Vestuario y Producción: Laura Galán
Ayudante de producción: Vicente Cámara
Es una producción de Check-in producciones, Teatro Español, Escena Nacional d´Andorra, Molinos de Papel, Mama Floriana y Asuntos Culturales