Qué poder estilístico tienen las gafas

Nada más y nada menos que 20 años llevamos en este siglo XXI. En apenas dos décadas hemos creado, reinventado y vuelto a recrear todo aquello que en épocas pasadas se ha llevado notoriamente de moda. Es más, hoy os venimos a contar cuál y cómo es el poder estilístico de las gafas que actualmente reclama el consumidor.

Para no ir más lejos, cabe destacar que la llegada de las lentillas a nuestro mundo hizo que el mood gafas quedará un poco estancado en casa. De hecho, no podemos negar que durante un tiempo los no amantes de las gafas graduadas pedíamos a gritos que este complemento no entrará en nuestro día a día.

Sin embargo, la llegada de los influencers nos hizo recordar la importancia que en su momento no achacábamos a esta necesidad. Pueden observar en la página oficial de Mó la cantidad de gente influyente que llevan ahora gafas. Véase aquí las influencers Teresa Ándres Gonzalvo (@teresaandresgonzalvo) y María Fernández Rubíes (@mariafrubies), dos jóvenes con gran apoyo detrás de sus redes sociales ya que cuentan con más de medio millón de seguidores.

No obstante, los influencers han ido un paso más allá. Ya sea por muro consumismo, por promocionar puras marcas a cambio de dinero… pero el clan gafas ha crecido desde hace mínimo tres años. Con esto quiero decir, que las gafas han pasado a convertirse en un complemento necesario más por su poder estilístico, que por su función. Como lo llaman ahora ‘’tiene rollito’’.

Para ello, como hablaba anteriormente, la marca Mó (Multiópticas) ha llevado hasta su creación un nuevo modelo de gafas llamadas #móbluestop. Son más bien una iniciativa para protegernos de las radicaciones que nos provocan los móviles y los ordenadores. Te preguntarás cómo es posible y es gracias a un filtro azul en sus lentes.

De hecho, no solo las gafas graduadas han sido el boom entre caras bien conocidas de diferentes ámbitos como la música, el cine, la moda, la televisión…

Sino gafas de sol; normales, básicas, de colores, a rayas, cuadradas, redondas, pequeñas, grandes, triangulares y un largo etcétera de mil combinaciones incluso una para cada outfit si es posible. Y de eso saben muy bien los influencers y modelos de nuestro siglo.