Llega septiembre, la vuelta a la rutina y, con ella, la ‘desintoxicación’, un término que entendemos más como sinónimo de adelgazar, pero que sin embargo engloba procesos mucho más amplios y complejos. Según el primer estudio de yoga online en español THECLASSyoga.com: “Desintoxicar puede mejorar el funcionamiento de los órganos internos a través de técnicas de respiración específicas, limpiar el organismo de líquidos acumulados, mantener el estado de relajación producido por las vacaciones gracias a la meditación y llena el cuerpo de energía, vitalidad y positivismo para la ‘vuelta al cole’ con tipos de yoga dinámicos”.
En este sentido, Lucía Liencres, fundadora de THECLASSyoga.com, señala que “no solo debemos pensar en desintoxicar el cuerpo, sino en prestar atención a la contaminación mental, de la cual nos despojamos un poco cuando estamos de vacaciones, pero que pronto vuelve solo con pensar en abrir el correo electrónico”. Todo ello forma parte del proceso de limpieza y desintoxicación. Eliminar toxinas también es sinónimo de eliminar todo aquello que es tóxico en nuestras vidas: estrés, pesimismo, falta de energía, cansancio, mal humor…
Desde TheClassYoga.com apuntan que, si nuestro objetivo es eliminar toxinas, es recomendable practicar tipos de yoga en los que se eleve la temperatura corporal y se sude más, donde haya un ejercicio más dinámico y menos pausado, fruto de acompasar la respiración con cada movimiento. Con ello, se conseguirá más fluidez y flexibilidad y, por tanto, será un poco más exigente a nivel físico. Según los expertos del primer estudio de yoga online en español, estos tipos de yoga serían:
- Vinyasa yoga: es un tipo de yoga en el que se hacen una serie de asanas sincronizadas con la respiración. Un tipo de vinyasa es, por ejemplo, el saludo al sol.
- Bikram yoga: proviene del hatha yoga y se basa en realizar una secuencia de 26 posturas y dos ejercicios de respiración a 40 º, por lo que las clases pueden ser bastante exigentes a nivel físico y mental.
- Power yoga: es un tipo de yoga dinámico que se basa en el yoga tradicional, pero con ciertas variaciones. Puede ser mucho más creativo porque da libertad al practicante para desarrollar su práctica.
- Rocket yoga: se basa en el ashtanga yoga, aunque menos rígido. Es una práctica más fluida y dinámica que ayuda a tonificar diferentes zonas del cuerpo, así como a trabajar la concentración, el equilibrio y la flexibilidad.
EJERCICIOS DE YOGA PARA DESINTOXICAR NUESTRO CUERPO
Lucía Liencres, fundadora de THECLASSyoga.com, ofrece una serie de ejercicios y técnicas basados en los yoga sutras de Patanjali, que promueven la sanación del cuerpo a través de diferentes prácticas, y que pueden ayudar en este proceso a la vuelta de las vacaciones:
- Kriyas. Fruto de los malos hábitos del verano, o de los excesos de bebidas alcohólicas o alimentos que no estamos acostumbrados a tomar, el hígado se ve perjudicado, ya que se encarga de procesar todos esos tóxicos. Es por ello por lo que los kriyas, técnicas de purificación o limpieza corporal para eliminar toxinas del cuerpo, son altamente recomendables: Kriya basti( limpieza de colon); Kriya kapalabhati (limpieza de cráneo y de las fosas nasales, despejando la mente); Kriya neti (limpieza nasal con ayuda de una ‘lota’ o recipiente con solución salina); Kriya nauli (limpieza del aparato digestivo, a través de movimientos laterales y verticales de los músculos abdominales); Kriya dhauti (limpieza del tracto intestinal); y Kriya tratak (purificación de la mirada).
- Shank prakshalana. Esta técnica consiste en limpiar bien el tubo digestivo y eliminar las sustancias que hayan podido quedar incrustadas en las paredes, y que no se evacúan solo con ir al baño. Para ello, se debe beber agua salada (5 gramos de sal o una cucharadita, por cada litro de agua, calentada a 30 ºC), y moverla por dentro del cuerpo para recorrer todo el intestino. Debe ser salada para que no se absorba por ósmosis y, con ello, se evacúe como orina normal. Este ejercicio es recomendable en ayunas.
LA DIGESTIÓN, CLAVE PARA CONTINUAR CON LA DESINTOXICACIÓN
Además de volver a llevar una alimentación variada y sana, es importante mejorar la digestión para ayudar al cuerpo en esta desintoxicación. Desde TheClassYoga.comrecomiendan realizar otras posturas de yoga que, gracias a la presión que ejercen del abdomen, favorecen el funcionamiento del hígado y de otros órganos internos. Concretamente, el yin yoga (práctica pausada en la que se mantienen las asanas de 2 a 8 minutos) sirve para trabajar a nivel interno órganos como el hígado o la vesícula biliar.
También existen otros ejercicios más específicos con los que mejorar el sistema digestivo como:
- Masaje interno: para masajear el hígado se pueden frotar los dos costados de forma oblicua, desde las axilas hasta el ombligo.
- Posturas invertidas: como su nombre indica, invierten el flujo habitual sanguíneo favoreciendo la circulación de la sangre. Una de las posturas por excelencia es sirsasana (equilibrio sobre la cabeza), aunque también destaca el perro boca abajo (adho mukha svanasana) o pincha mayurasana.
- Posturas de torsión y flexión: estas ayudan a colocar los órganos digestivos. Cuando se mantienen profundizando en la respiración, aportan numerosos beneficios, como soltar emociones bloqueadas o tensiones. En este caso destacan: ardha matsyendrasana (media torsión estando sentado) o jathara parivartanasana (tumbado, hacer una torsión de espaldas con los brazos en cruz y las piernas dobladas hacia un lado).
- Posturas de apertura de caderas: una buena postura para abrir las caderas y colocar la parte baja del abdomen es baddha konasana o postura de la mariposa. Se realiza sentado, juntando las palmas de los pies delante del tronco y bajando lentamente hacia delante, sin levantar los pies del suelo. Se mantiene durante 3 minutos aproximadamente.
MEDITACIONES PARA DESINTOXICAR LA MENTE
Vivimos de una forma tan acelerada, sin prestar atención a nada, con el piloto automático todo el día, que quizás el único momento en el que nos paramos y echamos el freno es en las vacaciones. Y, aun así, muchas veces nuestra mente sigue en la oficina, en casa o en los problemas diarios. “Practicar la meditación nos ayuda a gestionar estos pensamientos y emociones que nos bombardean constantemente, a saber desconectar de lo que nos rodea y conectar con nosotros mismos, los grandes olvidados”, explica Lucía Liencres.
Se puede meditar con diferentes enfoques: la respiración, el estado físico, los sonidos de nuestro alrededor, mirando una vela, repitiendo un mantra (silenciosamente o no), o con distintos objetivos: ser más compasivos, aprender a perdonar, vivir en el momento presente, agradecer y aceptar… Sea cual sea el motivo elegido, TheClassYoga.com aconseja no juzgarse cuando los pensamientos nos vengan a la cabeza.
“Para empezar a meditar no necesitas dedicar muchísimo tiempo, ni elegir un lugar o contexto especial. Puedes sentarte de forma cómoda en tu casa, poner una alarma de 5 minutos (o dejarte llevar por la experiencia), y observar tu respiración, enfocándote en tu nariz o en otras partes del cuerpo notando las sutiles sensaciones que se producen en esas zonas de tu cuerpo cuando respiras. Acepta el presente. La vuelta a la rutina es inevitable, pero todo es cuestión de actitud”, señala Lucía Liencres.