Visualmente, el pelo rizado puede ser muy bonito y llamativo, pero a la hora de la realidad… Se llega a convertir en un auténtico suplicio para poder lucir un pelo bien hidratado, con brillo y con unos rizos bien definidos.
Es por eso que hoy os traigo LA RUTINA PERFECTA para conseguirlo. ¡Atenta a los pasos que hay que seguir!
1. LAVADO
Empecemos por lo principal. Es importantísimo lavar el pelo con un champú que sea específico para nuestro tipo de cabello. No os estoy descubriendo nada nuevo, muy probablemente, pero de verdad, la elección del champú será un paso fundamental para poder conseguir una melena digna de anuncio.
Buscaremos un champú para cabello rizado (os dejaré mis recomendados más abajo) y lavaremos el pelo como de costumbre. Consejo: Usa la cantidad de producto adecuada. El tamaño de una nuez será más que suficiente para poder lavar perfectamente un pelo largo.
Una vez lo hayamos enjuagado bien, repite este paso, pero con una cantidad menor. Verás que al frotarlo saldrá más espuma que con el primer lavado. Es señal de que el pelo está totalmente limpio. ¡Vamos por el buen camino!
2. ACONDICIONADOR… ¿SÍ O NO?
Con respecto al acondicionador, vamos a encontrar diferentes opiniones sobre si se debe usar o no en un pelo rizado. Mi consejo es que SÓLO lo uséis de medios a puntas y que lo dejéis actuar tan sólo durante un minuto, ya que al aplicar más producto en el cabello, el pelo pesará más y los rizos caerán.
Si para ti es un paso imprescindible, intenta buscar un acondicionador que sea ligero.
3. MASCARILLA
Para un extra de hidratación, es recomendable usar una mascarilla una vez a la semana, pero nuestros rizos sólo la necesitarán una vez cada dos. Hay productos de uso diario que nos hidratarán el pelo sin aportarnos más peso, como he dicho antes. De todas formas, al igual que con el acondicionador, si tenéis la rutina de usarla cada semanas, intentad buscar una que no sea muy pesada.
4. ¿CÓMO Y CON QUÉ LO DESENREDAMOS?
¡Este paso es extra importante! Para desenredar el pelo correctamente hay que tener en cuenta dos cosas: la primera, el peine con el que vayamos a hacerlo; la segunda, el producto que usaremos para ayudarnos a desenredarlo.
Si tenéis el pelo rizado sabréis que, en ciertas ocasiones, puede ser realmente complicado quitar los nudos del pelo (sin mencionar cuando lo llevamos suelto y hace viento…), y es por ello que un acondicionador líquido en spray nos va a facilitar la tarea. A su vez, un peine de cerdas anchas (el conocido peine tipo «tenedor») nos desenredará el pelo sin rompernos el rizo.
Con esto, prometo que no quedará ni un enredo.
5. ¡VAMOS A SECARLO!
Último paso para lucir un pelazo.
Necesitaremos un secador con difusor (aunque ahora os daré un truquito para secarlo mucho más rápido, que sabemos que el difusor tarda demasiado en secarnos el pelo), algún producto para fijar el rizo y un poco de paciencia.
Primero, aplicaremos una espuma, loción, mousse o crema para darle un poco de forma al pelo, a la vez que definirá el rizo y lo hidratará. Personalmente, prefiero aquellos productos que no apelmacen mi pelo porque me gusta que quede muy natural, pero esto irá a gusto del consumidor.
Tras aplicarlo, cogeremos el secador SIN BOQUILLA y quitaremos el exceso de humedad del pelo, con la cabeza hacia abajo y ayudándonos de la mano para ir definiendo cada rizo. Cuando veamos que algunas zonas ya están un poco secas, pondremos EL DIFUSOR al secador y, con él, trabajaremos todos los mechones, con la cabeza hacia abajo también y con movimientos ascendentes y descendentes, aguantando un poco cada mechón para que termine de secarse y rizarse.
En menos de quince minutos, tendremos una preciosa melena rizada, prometido.