¿Se puede vivir sin aceite? ¡te lo contamos!

El aceite es un ingrediente imprescindible en cualquier cocina española pero ¿y si te dijera que es posible cocinar sin aceite? Para preparar un plato saludable es importante reducir el aceite e incluso cocinar sin él. En el universo de la comida saludable se está poniendo de moda aprender a cocinar sin aceite. 

Uno de los grandes beneficios de la dieta mediterránea se debe al uso del aceite de oliva, por ello la cocina española tiene una personalidad única y carácter propio. Muchos expertos aseguran que el aceite de oliva es uno de los alimentos más sanos que existen en nuestro día a día y añaden que tienen numerosos beneficios como controlar el nivel de colesterol sobre todo si se consume en crudo. 

Sin embargo agregar aceite de oliva a tu plato también conlleva sumarle calorías y aumentar el consumo de grasas, aunque sean sanas. Por lo que si excluyes el aceite de tu dieta, reduces automáticamente calorías a tu plato. Además pocas horas después de haber consumido aceite vegetal, las arterias se endurecen y la capacidad de dilatación que tienen se ve reducida. 

Son ya muchos expertos en nutrición quienes recomiendan cambiar la rutina alimenticia e incorporar el aceite de oliva únicamente en momentos realmente necesarios. Existen muchos sustitutos del aceite que no son conocidos con los que puedes cocinar sin prescindir del sabor. Estos sustitutos permitirán que puedas cocinar con toda la comodidad con la que solías cocinar y que además no se te peguen a la sartén. 

Te presentamos los sustitutos del aceite: 

1. Zumo de limón:

El zumo de limón reduce las calorías y es perfecto cuando estamos cocinando pescados ya que añade e intensifica el sabor. 

2. Agua con especias:

Mezclar agua con diferentes especias es otra opción muy inteligente para evitar el aceite. En función de lo que estés cocinando puedes añadir unas especias u otras. 

3. Cocinar en el horno:

Al cocinar en el horno podemos reducir considerablemente el aceite y conseguir que los alimentos queden igual de jugosos. 

4. Un chorreón de vino:

Añade sabor a la comida y reduce calorías. 

5. Caldo de verduras:

Además de añadir sabor, evitará que la comida se adhiera a la sartén. 

6. Al vapor:

Cuando cocinamos al vapor no necesitamos recurrir al aceite y suma vitaminas a tus verduras.