La nueva edición de Supervivientes ha comenzado, y como cada año el reality show ha contado con una gran audiencia. El formato ha conseguido atrapar a 3.685.000 espectadores y obtener un 29% de share, convirtiéndose este estreno en el segundo mejor arranque de toda su historia.
Un clásico ya de este programa es el salto del avión de los concursantes, que sin duda este año ha estado protagonizado por Miriam Saavedra, la novia de Carlos Lozano. Y es que la peruana estuvo un buen rato decidiendo si tirarse o no, hasta el punto de que Jorge Javier tuviera que pedirle que saltase para que el programa pudiese continuar.
Y por cierto, si no quedaron satisfechos con la participación de Lozano en GH VIP 4, ahora también podrán disfrutar de él en Supervivientes, ya que se encargará de defender a su novia. Pero no solo esta cara será la que nos suene de GH VIP. Laura Matamoros se une como colaboradora en el debate de los domingos, que presentará Sandra Barneda.
Y con el estreno del programa, los concursantes tuvieron que hacer frente a una prueba que serviría para que estos se repartieran en dos grupos. El del fuego y el del agua.
El primero integrado por Mila, que estuvo a punto de cambiarse al otro equipo para estar con su amigo Antonio Tejado, Suso, Mari Carmen, Dulce, Jorge, Paco de Benito y Víctor Sandoval. Y el segundo quedaba formado por Yola, Yurena, Steisy, Mario, Cristian, Miriam, Dioni y Antonio.
Y a pesar de no llevar ni una semana conviviendo, ya han surgido las primeras disputas. Y es que Mila, a pesar de que se llevó una gran alegría al encontrarse con Dulce, ya ha tenido un enfrentamiento con la niñera de Chabelita. Aun así, las dos han arreglado sus diferencias.
Otro que tampoco va muy bien encaminado es Víctor Sandoval, ya que ciertos comentarios vertidos por el colaborador han llevado a muchos de sus compañeros al límite.
En esta ocasión, los participantes no han tenido que nominar, pero si lo tendrán que hacer el próximo domingo. Ante esto los concursantes han mostrado su alegría ya que al llevar tan poco tiempo algunos no saben a quién colocarle sus votos.
Por último, los dos equipos tuvieron que participar en un nuevo juego, en el cual Cristian partía con ventaja por haber sido elegido por el público como el mejor al saltar del helicóptero. La prueba tenía como objetivo saber que grupo viviría esta semana en Playa Paraíso, la isla soñada, o bien en Laguna Cacao, la selva. Finalmente el equipo fuego se quedaba con el paraíso y el equipo agua con lo tenebroso.