‘Taxi a Gibraltar’, el viaje más caro de la historia

Se ha presentado en el Festival de Málaga, en su jornada inaugural, la película ‘Taxi a Gibraltar’, una comedia protagonizada por Dani Rovira, Ingrid García-Jonsson y Joaquín Furriel, además dirigida por Alejo Flah que, como siempre, llevó lo mejor de su acento argentino a lo más alto del panorama. La película se estrenaba también en más de 300 salas de cine del territorio nacional en el día de hoy, así que sino estas en Málaga y quieres desconectar de tu vida diaria vete al cine y disfruta.

Dos hombres desesperados emprenden un loco viaje a Gibraltar. León (Dani Rovira) es un taxista acosado por las deudas y enfadado con el sistema y el mundo en general y Diego (Joaquín Furriel) es un argentino tan encantador como embaucador que acaba de salir de la cárcel. En el camino, se cruzarán con Sandra (Ingrid García Jonsson), una alocada joven que está espantada del horror de vida que lleva. Tres personas sin rumbo que se embarcarán en la mayor aventura de sus vidas: encontrar el cargamento de oro perdido en los túneles del peñón de Gibraltar. Una aventura en la que los tres protagonistas descubrirán los verdaderos valores de la vida.

Tenemos que ser sinceros la película está muy bien argumentaba, montada y elegida. Pero, es una película sencilla, divertida y predecible. Es de estas películas que cuando te sientas en la butaca, tu mente adelanta los acontecimientos de las escenas y eso no siempre gusta. Aunque hay que destacar que gracias al guión de la película, las carcajadas están aseguradas.

En cuanto a la calidad actoral, me gustaría destacar la interpretación de Ingrid García-Jonsson, estamos acostumbrados a ver a esta actriz haciendo papeles totalmente diferente y hemos descubierto un verdadera actriz: creíble, verdadera, natural y sobretodo, realista, de hecho la misma actriz ha dicho: »Todos mis personajes tienen en común la verdad», desde luego, salvaste la película en el minuto 41 y eso es de agradecer. Además, es una pena, pero no sabemos que ha pasado con Rovira, su papel no era gracioso, no tenía que hacer gracia y no era creíble, sus miradas, su interpretación, se veía un poco sobre actuado, aunque había momentos que podríamos confundir su cara con una película dramática en la que su madre acabase muriendo, pero no, no era así.

Dicen que todos los días se aprenden cosas nuevas y hoy gracias a ‘Taxi a Gibraltar’ nos vamos con la lección aprendida: los Uber-Cabify desatan la ira de los taxistas, nunca creas a un argentino, en Gibraltar se habla un perfecto ‘spanglish’ y que el oro está sobrevalorado. Después de todo esto, os invito a que vayáis al cine y veáis la película de Alejo Flah, por lo menos, lo pasarás bien. ¡Ah, importante! No vayas con expectativas, será mucho mejor.