¿Alguna vez has experimentado dolor o incomodidad alrededor del área anal? No te preocupes, tenemos algo para ti: ¡una solución para las hemorroides! Existen pomadas que no requieren receta que puedes adquirir en farmacias y están diseñadas para aliviar el dolor y la incomodidad asociados con las hemorroides. Sus fórmulas suaves pero efectivas están creadas para reducir la inflamación y acelerar la curación. Por ejemplo, Proctolog , cuyos activos tienen acción antiespasmódica, anestésica y analgésica.
Esta pomada se ha convertido en una solución para las hemorroides de mucha población. Contiene una asociación de sustancias activas como la ruscogenina, con acción antiinflamatoria, y la trimebutina, con actividad anestésica local y analgésica, así como efecto antiespasmódico, que aliviará los síntomas y te hará sentir mejor tras su sencilla aplicación.
Personas adultas con estreñimiento y hemorroides y aquellas que realizan un esfuerzo prolongado al evacuar son los pacientes que más comúnmente utilizan esta pomada. Su aplicación alivia el dolor intenso tras la evacuación, el cual puede prolongarse durante horas, además de aliviar el picor anal que producen las hemorroides gracias a sus activos como la trimebutina y la ruscogenina.
Esta pomada está indicada tanto para hemorroides como para fisuras anales y no se han registrado contraindicaciones ni interacciones con otros medicamentos, ni hay que tomar ninguna precaución adicional tras su fácil aplicación. Tampoco se han descrito advertencias para su uso durante el embarazo y la lactancia, ni efectos sobre la capacidad de conducción. La intoxicación por este preparado es prácticamente imposible, aunque en caso de sobredosis o ingestión accidental, deberás consultar al Servicio de Información Toxicológica (teléfono: 91 562 04 20).
La aplicación de esta pomada es muy sencilla. Primero, asegúrate de lavarte bien las manos y la zona anal antes de suministrarla. Luego, retira la tapa del tubo y apriétalo suavemente para extraer la cantidad necesaria a aplicar. Espárcela en la zona afectada con los dedos y, después, lávate las manos.
El proceso de aplicación es parecido si utilizas el aplicador para introducir la crema en la zona rectal y paliar los síntomas de las hemorroides internas. Una vez retirada la tapa del tubo, ajusta el aplicador en la parte superior de éste. Apriétalo suavemente para llenar el aplicador con la cantidad adecuada de pomada. Introdúcelo suavemente en el recto y aprieta el tubo lentamente para liberar la crema en el interior del ano. Retira, también de forma suave, el aplicador y limpia cualquier exceso de crema.
Es importante seguir las instrucciones del prospecto y consultar con un médico si tienes alguna duda o si la afección persiste. A título indicativo, se recomiendan de una a dos aplicaciones al día.
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